Sasha I. Tretiakov

Nombre Completo: Alexander Ivánovich Tretiakov
Apodos: Sasha, Diva
Fecha de Nacimiento: 17 de Septiembre, 1990.
Edad: Treinta años
Nacionalidad: Rusa
Ocupación real: Administrador del Black Theater/Trata de Personas
Ocupación ficticia: Un benefactor adinerado de las causas publicas de la ciudad.
Orientación Sexual: Bisexual
Posicion sexual: Suke

Si Sasha pasara a tu lado mientras caminas en la calle, creerías que se trata de alguna supermodelo. Y no sorprende que la gente pudiera pensar esto, pues no hay nada en su apariencia exterior que indique su verdadera condición de hombre además de su nulo pecho. Posee un rostro femenino y atractivo, con ojos de un tono que varia de rojo a naranja o violeta, además de una larga cabellera rubia-platinada que se extiende hasta más allá de su cintura.

Este ruso puede ser fácilmente descrito como andrógino, pues su contextura ósea tampoco es que sea muy propia de los hombres. Delgado en extremo, y hasta se pueden observar unos ligeros contornos en su cuerpo que evocan las curvas femeninas. Es un hombre alto, midiendo alrededor de un metro setenta y ocho centímetros, y que de una manera u otra inspira respeto y autoridad. Otra cosa muy sobresaliente en el es que no aparenta ni por asomo la edad que tiene, lo que le ayuda bastante a la hora de conseguir victimas de cualquier genero o edad.

A la hora de vestir, es muy común verlo optar por ropas femeninas que suelen quedarle demasiado bien. Tiene un buen sentido de la moda y es fanático de esas revistas para adolescentes pues puede ver las últimas tendencias. Cuando se encuentra de mal humor, opta por los trajes clásicos de hombres pues no tiene cabeza para encontrar la combinación perfecta de ropas.

Primero que nada, es imposible saber realmente que es lo que pasa por la cabeza de Sasha, por lo que ni siquiera su mejor amigo puede mofarse de conocerlo totalmente. Bien podría decirse que sus automáticos cambios de personalidad en algunas ocasiones son señales de trastornos mentales graves, pero nadie se ha atrevido a cuestionarlo en voz alta jamas.

Se muestra ante todo el mundo como una persona amigable y sonriente, a la que aparentemente nada le afecta y que posee un positivismo bastante molesto. Suele hablar con un tono de voz muy suave, que le añade aun mas despreocupación a sus palabras. Es un hombre coqueto y de maneras femeninas, cualidades que no le queden para nada mal considerando su físico. Algunas veces puede llegar a ser hasta infantil, lo que es bastante gracioso para quien lo vea haciendo pucheros y haciéndose el herido. A esto debemos agregar que peca de ser algo dramático y un gran actor cuando se lo propone.

Presumiblemente siempre esta de buen humor para gastar bromas y ponerle apodos a todo mundo, pero esto no es cierto. Hay ocasiones en que, tan rápido como el parpadeo, puede pasar de tratarte de la manera en que siempre lo hace a pegarte contra una pared y mirarte lleno de odio. Y en estas ocasiones ya no hay rastros del despreocupado y tranquilo Sasha; solo queda un Alexander sediento de sangre. Lo peor de todo es que estos cambios no se generan gracias a la mención de un simple tema, como su pasado o que se le subestime. Simplemente ocurre, y la gente alrededor suyo a tenido que aprender a vivir con ello.

Ignorando estos "ataques", Sasha es simplemente un criminal travestí y coqueto, con una mirada de astucia y una eterna sonrisa en el rostro.

Los inicios de la vida de Sasha se remontan al centro de Rusia, cuando su apellido aun no era Tretiakov. Primer hijo de un matrimonio pobre en un barrio de mala muerte, su nacimiento solo trajo mas problemas y dolores de cabeza para el patriarca de la familia. Por lo que el hombre, ambicioso y miserable como era, solo un año después del nacimiento de Alexander obligo a su esposa a prostituirse, aprovechando su belleza y juventud. Pero una vida como aquella no era plena ni para la esposa ni para el hijo, por lo que la violencia y las discusiones eran frecuentes en casa. Cuando una segunda hija fue anunciada, la situación empeoro.

Poco tiempo después del nacimiento de Ekaterina, y con una Yalenka postrada en cama, a Ivan no le mas remedio que parar el negocio hasta que su mujer se recuperara. Pero con el paso del tiempo el cuerpo de Yalenka simplemente no fue el mismo y el padre no pudo mas que desviar la atención a su hijo de ocho años, que parecía mas una niña que el hombre que cualquier padre hubiese querido. Entonces, decidió utilizarlo a el para despertar el morbo en los clientes de la ciudad. Sasha no opuso mucha resistencia, pues entendía que si eso ayudaría a su familia estaba bien.

Su padre lo obligaba a vestirse de niña, a actuar como una, a hablar como una. Era popular y no fueron pocos los años en que toda esa situación perduro, sembrando en el la semilla de que lo hacia no estaba mal. Cuando tenia diecisiete, y en el tope de su fama, descubrió un día que su padre estaba intentando envolver a su hermana menor en el mismo mundo, algo que definitivamente Sasha no quería para ella. La cólera lo invadió y por primera en mucho tiempo ya no era ese personaje delicado y perfecto que había inventado para ganarse la vida. Cuando su padre le dio el primer puñetazo, fue la gota que derramo el vaso. El lo dejo inconsciente bajo las miradas aterradas de su hermana y madre, y lo arrastro fuera de la cara. Simplemente, lo asesino. Un hombre que atentara contra la inocencia de su hermana no merecía seguir viviendo. Tomo el dinero de sus ganancias que su padre había estado escondiendo y le dio la mitad a su madre para que se llevara a Ekaterina a un lugar mejor. Su rostro era impenetrable y su sonrisa amigable, como si nada hubiese pasado, era macabra. La mujer obedeció y desapareció junto a su hija.

Convencido de que lo que había hecho era lo mejor, Sasha se mudo de la minúscula casa y se cambio el apellido, pues le repugnaba tener alguna relacion con aquel hombre, haciendo lo que mejor sabia hacer: vender su cuerpo. Hasta que cierto día un negociante le propuso ser parte de su negocio en la Trata de Personas, y como Sasha no tenia nada mas que hacer... Sus ideas revolucionarias, sus consejos y la manera tan eficaz en que se desenvolvía en el negocio le permitió hacerse de un nombre rápidamente, y hasta ser el líder de su propio grupo. Viajo por todos lados, haciéndose cargo de sus propios negocios, agregando gente a su grupo, siendo temido y mundialmente buscado en poco tiempo. En uno de sus viajes conoció a un joven muy singular, Lemanth Van Damme, con quien compartió su mas reciente idea de crear un lugar donde pudieran exhibir y vender su "mercancía" con mas libertad. El joven se convirtió en su socio, y mas tarde en su amigo mas cercano.

Ambos se codearon con las mentes criminales mas grandes de los tiempos actuales e hicieron asociaciones con los mismos, hasta que la idea de los Apostles y de tomar Paradise City bajo su posesión surgió como el proyecto mas importante del crimen del ultimo siglo.

Otros datos

Gustos: Trasvertirse, beber champagne, dramatizar cualquier situación, pasear por la ciudad, divertirse a costa de los demás, cepillar su cabello.
Disgustos: Las personas demasiado serias, el ruido y los dulces.
Manías: Taconear el suelo cuando esta aburrido. Sabes que esta nervioso sobre algo cuando no puede estarse quieto en un solo lugar.
Fobias: A pesar de que tiene años sin ver a su hermana, tener consciencia de que algo malo pudiera llegar a pasarle lo descoloca totalmente. Mas que temor, la idea lo aterroriza.
Miedos: Por mas extraño que parezca, le tiene pavor a los perros muy grandes.